domingo, agosto 17, 2008

Interpretación del texto de Roberto Guimaraes “Tierras de sombras: desafíos de la sustentabilidad y del desarrollo territorial y local ante la globali

Para el autor la modernidad no ha renunciado a las antiguas formas de someter e invadir a los pueblos, hoy con la poderosa maquinaría que representa la economía mundial y los organismos globales de organización como el Fondo Monetario Internacional, Organización Mundial de Comercial, Bretton Woods, realizan las mismas prácticas de dominación sin dar solución a problemas claves para la humanidad como lo es la pobreza, herramienta con la cual probablemente se sostenga la hegemonía de las clases realmente dominantes.

Gran responsable de la divulgadora doctrina del capitalismo ha sido la modernamente llamada globalización, que disfrazada con elementos culturales, ha permitido que la falsa sensación de bienestar se transforme en el status quo de la sociedad, permitiendo la complicidad de advenimiento de que las cosas están bien.

Según el autor el deterioro de las clases sociales caídas en la pobreza tienen directa relación con el problema medio ambiental, cuestión que, haciendo uso de la globalización, nos ha permitido caer en cuenta del estado real de las cosas. El autor comenta al respecto: es más, ha sido el proceso de globalización que, por primera vez, ha revelado el acierto de afirmar que la historia del ser humano es la historia de sus relaciones con la naturaleza y que, además, nuestras vidas se han fragilizado por igual, ricos y pobres, Norte y Sur, aunque las posibilidades de supervivencia estén supeditadas a notables diferencias de acceso al poder y acceso a recursos y procesos naturales. Se pude establecer un paralelo con la teoría expuesta por U. Beck en “los de arriba y los de abajo”.

Surge entonces la necesidad de establecer políticas medio ambientales que logren mejorar la relación con la naturaleza y con las sustentabilidad. Se hace patente para el autor la intervención de la Ecopolítica, una forma de institucionalizar al poder con la regulación del consumo de recursos. La instauración de un marco teórico en nuestra toma de decisiones económicas y políticas. La directa relación entre el aumento de la explotación de recursos con el aumento de la población, se ve agravada cuando se mezcla con sociedades en donde la distribución de la riqueza solo va en detrimento de la poblaciones aumentando los niveles pobreza. La ecopolítica debe ir con el discurso de la sustentabilidad y como plus, la intervención en temas sociales para dar solución mediante políticas ecológicas institucionalizadas de la cuestión de la pobreza.

La ecopolítica sumado al papel preponderante que ha tenido la globalización en las últimas décadas, obliga a pensar necesariamente en una revitalización del rol del estado, asumiendo un rol que garantice el equilibrio en la explotación de recursos y la intervención de modelos sustentable de producción. Ya sabemos que el modelo capitalista urge en depravar rápidamente todas las fuentes de recursos primarios tan abundantes en países tercer mundistas (sub desarrollados según la terminología neoliberal), la vuelta a un socialismo igualitario puede resonar en las oídos de muchos como el fantasma de los viejos comunismos proletarios, pero las cadenas de producción actuales pueden ser previstas bajo la intervención del estado en todas sus dimensiones.

Dentro del las filosofías progresistas, el ambientalismo representa hoy la resistencia a la modernidad del consumo cien años mas tarde, y no es por que ser ambientalista esté de moda, sino que para frenar la depredación de las materias primas es necesario un viraje en los estilos de vida, algo que profundice en las razones del capitalismo moderno y frene las ansias por adquirir y dejarse de llevar por los estilos de consumo emocional que existen hoy por hoy (G. Lipovetsky).

El autor sitúa su posición anti sistémica al reflexionar ante la posibilidad de ir un paco más allá de la política, sabiendo que el discurso por la sustentabilidad no está direccionado a las sociedades sino a las personas mismas, al ciudadano, al consumidor, sencillamente aplica su doctrina al modo de cambiar “la política”, en concordancia con la sentencia de U. Beck “nuestro destino es tener que inventar de nuevo lo político.

La diferenciación entre desarrollo sostenible y redesarrollo sustentable es fácil de percibir cuando damos cuenta que el desarrollo no se puede sostener bajo políticas de consumo depredadoras y de desgaste con las materias primas, a diferencia de la sustentabilidad que busca la explotación de los recursos con el cuidado de conservar las riquezas para las futuras generaciones (G. Brundtland). El desarrollo pensado desde el punto de vista sostenible es un imposible ya que no se pueden separar de él, el crecimiento simbiótico de pobreza y degradación ambiental. Esta diferenciación es llamada por el autor sustentabilidad ecoambiental.

La función del estado ha sido mermada por las condiciones que impone la globalización y la red mercados capitalistas, así entendido, los términos económicos que funcionan con las lógicas neoliberales son difíciles de vulnerar bajo la perspectiva ambientalista. La función de la ecopolítica y el uso que esta haga de los medios de comunicación serán de vital importancia para refundar el imaginario político y reencantar a la ciudadanía bajo terminose éticos que consideren la justicia social en los términos de justicia productiva y justicia distributiva. Es una vuelta de modelo y la instauración de un nuevo paradigma que considere la sustentabilidad como el horizonte de preservación de la raza humana.

Interpretación del texto de Gerd Michelsen “¿Qué es lo específico en la comunicación sobre temas ambientales?

Toda la exposición que hace el autor es realizada y pensada desde la realidad alemana, país desde donde se ubica para mirar la realidad y utilizar ejemplos concretos de las políticas llevadas adelante por los organismos gubernamentales y por la sociedad civil.

La base para comenzar a hablar de la comunicación en temas ambientales, pasa por establecer la importancia de esta en las masas, por su carácter de influenciabilidad, de dar a conocer acontecimientos que de otra manera permanecerían en el absoluto anonimato. Lo que lleva a pensar que las comunicaciones se han instalado en la sociedad de tal manera que lo planteado en ellas es a lo menos incuestionable según los cánones con los que hoy se rige, idea que el autor toma del planteamiento de N. Luhmann.

De la mano de programas gubernamentales se ha logrado establecer el tema medioambiental en programas de televisión y en políticas sociales, asociadas a organismos de participación civil, el discurso sobre sustentabilidad esta entonces dispuesto en la sociedad por medio de los canales de comunicación oficiales y privados. La discusión sobre sustentabilidad se divide entre el saber popular y el saber especializado que se da a nivel de expertos.

Pero la popularidad del discurso sustentable es paradójico (Jänicke), ya que la sobre exposición de los problemas no resueltos, lleva a una malograda sensación de bienestar cuando estos son solucionados, dejando atrás las cuestiones realmente importantes. Los mejoramientos parciales ocultan los problemas medioambientales a más largo plazo.

La juventud ha sido educada en torno al problema de sustentabilidad y desconocen lo que subyace, el autor lo llama el problema NO sustentable, que es la verdadera amenaza y perjuicio para el hombre y el medioambiente.

Las soluciones pasan por una visión de largo plazo, esto eliminaría la falsa percepción de las pequeñas victorias a que se refería en la paradoja de Jänicke, la instalación de la visión largoplacista permitiría dar solución certera a la esencia de la sustentabilidad.

Una practica esencial en el discurso del medio ambiente, como estrategia comunicacional es no dejar de lado la emotividad que produce en sociedad, Michelsen las llama concepto de acción socio-emotiva. Esto ayuda a la integración abstracta del problema, la escenificación de la destrucción del bosque, por ejemplo, causa mayor efecto emocional, por lo tanto se integra mas rápido el discurso, que explicar de manera científica por lo tanto conceptual, de lo que significa la perdida de miles de hectáreas de árboles.

Claro que las técnicas de comunicación otorgan un rango principal a la influencia de rostros conocidos por sobre aquellos profesionales medio ambientalistas que estudian y viven en torno al problema medioambiental. Por este motivo el autor da especial importancia al rol comunicacional y de credibilidad que debe tener quien instale el mensaje en los medios de comunicación. La instalación del mensaje debe ser hecho por autoridades reconocidas públicamente que le otorguen cierto status al mensaje.

Se puede entender del autor que su idea de involucrar los temas ambientales y de sustentabilidad con estilos de vida entendido como tal el concepto de moda, puede lograr que estos temas sean asumidos por la sociedad al igual que los medios y que usen el marketing para imponer tal o cual regla en las conciencias. Si se impone el estilo de vida sustentable como una moda que ha llegado para quedarse (usando el mismo vocabulario magazinesco de los medios), es posible que la sustentabilidad sea interiorizada y asumida como tal.

La consideración del riesgo en materia de sustentabilidad es un punto en que el autor desarrolla la importancia de tomar en cuenta. El desastre nuclear, la extinción de especies, los desastres naturales, estas ideas se mueven en una esfera entre entendimiento de las ciencias sobre el riesgo y la percepción subjetiva del riesgo.

La participación social se ha dado gracias a la divulgación mediática de la sustentabilidad, permitiendo que esta se incorpore en la toma de decisiones y en la definición de problemas.

La confianza que se debe establecer a niveles micro, para que la institucionalización del discurso sustentable tenga que ser asumida como tal, de manera que los pobladores, artesanos, agricultores, en fin la sociedad, pueda ejercer políticas de desarrollo urbano sustentable en el marco de un proceso de comunicación amplio y convenido.